Al terminar la educación secundaria obligatoria, Marta dejó los estudios. Nunca le había gustado estudiar, no sabía para que servían las matemáticas ni el inglés, lo que tenía muy claro es que le apasionaba el mundo de la moda. Una chica como ella, tan a la última, no tuvo nada difícil a la hora de acceder al puesto de trabajo que tanto le gustaba, dependienta de una tienda de ropa de moda joven.
Al principio todo fue tal y como ella lo había pensado. Tenía dinero, independencia, medio sábado y domingo libres, vacaciones y pagas extras. Marta trabajó en diferentes tiendas del mismo estilo, tienda de ropa para gente joven a la última moda, incluso llegó a ser encargada. El problema surgió cuando en su último trabajo, debido a la caída de las ventas, comenzaron a despedir a gente. La mayoría de sus compañeras de trabajo eran muy válidas y con una amplia experiencia en el sector textil, así que decidir quienes iban a ser despedidas, era una cuestión complicada. Así que en principio, decidieron despedir a las dos únicas chicas que no tenían una segunda lengua, como inglés, francés o alemán.
Así que, ahora, Marta se encontraba por primera vez en el paro. Pensó que encontrar un trabajo con las mismas condiciones que hasta ahora había disfrutado iba a ser tarea fácil, pero se equivocaba. Pasaron muchos meses, y muchas entrevistas, y finalmente ya ni siquiera hubo entrevistas. Marta no cumplía los requisitos. Los idiomas y el bachillerato se habían convertido en un requisito imprescindible para acceder a un puesto, que antiguamente, no habría supuesto ninguna dificultad para Marta, pero ahora sí, la gente de hoy en día está muy formada, muy preparada. Graduadas y algunas, hasta con máster, ese es el perfil de la nueva generación de su viejo trabajo.
Así que no lo pensó más y comenzó al estudiar el acceso a la universidad para mayores de 25. Competir en un mundo como el de hoy, con una juventud tan formada exige preparación. El centro universitario San Bernardo, es un centro en el que preparan a las personas mayores de 25 años y que garantiza el acceso de éstas a cualquiera de los títulos de grado universitario que ofertan actualmente las universidades, así como para la posterior superación de los estudios universitarios.
Ahora, Marta, tenía que concentrarse en estudiar y decidir que carrera es la más adecuada para ella, la que ofrece más salida, la que considera que se adapta mejor a sus capacidades.Ella no sabía si quería seguir en el mundo de la moda, pero esta vez, diseñando, creando, marcando estilo, o dar un giro radical a su carrera y estudiar otra de sus grandes pasiones, el periodismo.
Se había informado y sabía que la Universidad politécnica de Madrid, sin duda una de las más prestigiosas de España, ofrece la posibilidad de estudiar un Grado Universitario de Diseño y Moda, pero la espinita del periodismo… Marta recordaba cuando, siendo una niña, jugaba a entrevistar a su tía María mientras fregaba los platos, Señorita Margot, solía llamarla.
De todas formas, esta no era una decisión que pudiera tomar de buenas a primeras, requería reflexión.
Las carreras más demandadas en España.
Así que Marta comenzó a estudiar las diferentes posibilidades, de acuerdo con sus capacidades y preferencias, y encontró mucha información.
Actualmente, entre las carreras universitarias más demandadas en España se encuentran las siguientes:
- ADE
- Arquitectura
- Bellas artes
- Políticas
- Comunicación audiovisual
- Derecho
- Económicas
- Educación social
- Enfermería
- Farmacia
- Filología inglesa
- Filología hispánica
- Ingienería agrícola
- Ing. Civil
- Ing. Eléctrica
- Ing. Mecánica
- Ing. Informática
- Ing. Química
- Telecomunicaciones
- Educación infantil
- Educación primaria
- Medicina
- Dietética y nutrición
- Óptica y optometría
- Psicología
- Periodismo
- Publicidad y RRPP
- Relaciones laborales
- Trabajo social
- Traducción e interpretación.
Marta aprobó el acceso a la universidad y, finalmente entró en educación infantil. Mientras estudiaba su carrera aún tuvo tiempo de sacarse su asignatura pendiente, el First. Nunca lo hubiera imaginado pero, finalmente, encontró su vocación. Ahora está haciendo las prácticas y tiene muchas posibilidades de entrar a trabajar el próximo curso en un colegio de su ciudad.
Si te sientes identificad@ con Marta, no lo dudes, y lánzate a la nueva moda del siglo XXI, la Universidad.