Acaba de entrar el verano y con él sabemos que sí o sí llegará el buen tiempo dentro de poco, huele a verano, a días soleados, paseos por la explanada, tardes de terrazas, excursiones por calitas y descanso bajo la sombrilla en la playa. Y para todo ello, como todos los años, nos debemos de preparar.
La llegada de la primavera y sobre todo el verano significa sol puesto, que somos un país de la Europa meridional, un país mediterráneo. El sol es fuente de vitamina D, nos ayuda a florecer como lo hacen las plantas, sin el sol no podríamos vivir biológicamente, es más, para las personas que son emocionalmente estacionales es algo imprescindible, un invierno sin sol resulta deprimente, mientras que con la llegada de la primavera el ánimo aumenta gracias a los rayos de luz, el sol es alegría, anima a salir de casa y hacer multitud de actividades.
Pero ojo que todo tiene una cara B, y con esto no podría ser menos, debemos saber y tener en cuenta que con los rayos UVA existen una serie de riesgos que se corren y debemos seguir una serie de recomendaciones para que el sol no nos juegue malas pasadas y que nuestra época del año favorita nos arruine la salud. Es por ello que debemos adoptar unos cuantos consejos recomendados por especialistas para el correcto cuidado de nuestra salud, en concreto de nuestra piel y nuestros ojos.
Uno de esos problemas es meramente estético: envejecimiento prematuro, manchas en la piel, etc. Contra él, lo mejor es usar cremas solares de alta protección, de hecho nosotros recomendamos le uso siempre de la máxima protección, y si ya empiezas a notar cómo tu piel,e incluso tu organismo, siente ese paso del tiempo, la mejor recomendación es una dieta equilibrada y sana, ejercicio físico y algún que otro suplemento natural antioxidante como el polvo de granada o el Tetrasod.
Otro grave problema es el cáncer, y contra ese no hay trucos que valgan.
Con gafas o lentillas, cuidado con la salud de tus ojos
Exponernos a la luz solar sin la correcta protección supone exponernos a padecer diferentes problemas de piel, entre los cuales el más importante y más temido es el cáncer de piel. Todas las personas deben protegerse adecuadamente y esto empieza por ponerse la ropa adecuada a pesar del calor, esto es, llevar prendas de colores claros y que no sean ajustadas, para que actúen de filtro a la vez que permitan la ventilación. Además, debemos utilizar gorras y sombreros para proteger nuestra cabeza, no solo para evitarnos dolores de cabeza, sino para proteger nuestra cara de la acción directa del sol en la medida de lo posible. Junto a la ropa y los sombreros no podemos olvidaros de unas buenas gafas de sol, homologadas para la protección de los rayos UVA como marca la normativa de la Unión Europea. No debemos comprar cualquier gafa en cualquier sitio que no nos aseguren tal homologación y mucho menos en cualquier mercadillo de calle, al fin y al cabo nos estamos jugando la salud de nuestros ojos, sin unas buenas gafas de sol nos estamos arriesgando a diferentes lesiones oculares como conjuntivitis, fotoqueratitis, cataratas precoces, retinopatías y degeneración macular, entre otras. En las ópticas recomiendan comprar gafas de marcas reconocidas o de la marca de la propia óptica donde las adquieras, siempre y cuando la óptica se haga responsable de la garantía de su marca, por supuesto.
Mención aparte merecen las cremas de protección solar, debemos utilizarlas sin excusa junto a todas estas medidas que comentamos, y sobre todo, de factor muy alto en las horas más intensas de luz, cremas especiales tanto para el cuerpo como para la cara ya que ésta última tiene una sensibilidad mayor a la exposición al sol, de ahí la importancia de utilizar sombrero, gafas y crema conjuntamente.
Junto a estas medidas hay que tener en cuenta que no debemos exponernos al sol en las horas de mayor impacto solar, en pleno verano, de las 11 a las 17h es cuando se considera que debemos tener más cuidado, evitar la exposición y si no es posible, extremas las medidas de protección sin olvidar ninguna. Hay que tener en cuenta que el cáncer de piel es el más extendido y esto se debe a que hoy en día la gente sigue sin estar concienciada y sigue arriesgando su salud al no tomar medidas de prevención. Un sector de la población muy sensible al cáncer de piel es el de piel clara y los que tienen muchos melanomas, también conocidos como melanomas. Estas personas deben llevar un especial cuidado y seguimiento de su piel y acudir al médico regularmente para realizarse controles anuales. No obstante desde casa se pueden observar una serie de características morfológicas para el control de éstos melanomas y si se observa cualquier cambio acudir rápidamente al especialista:
- Se debe controlar la simetría de los lunares.
- El color debe ser uniforme, no debe tener varias tonalidades.
- Los bordes deben estar delimitados claramente, no deben ser borrosos.
- Los lunares no deben ser muy grandes ni cambiar de tamaño.